Es probable que se produzcan retrasos y crisis en las próximas semanas. Incluso el inicio de la tregua, programada para la mañana del 19 de enero, se retrasó casi tres horas porque Hamas no cumplió con un plazo para proporcionar los nombres de los rehenes que liberaría. Israel ya había comenzado a retirar tropas del norte de Gaza y permitió, por primera vez desde mayo, que camiones con ayuda ingresaran directamente a Gaza desde Egipto a través del paso de Rafah. Sin embargo, continuó llevando a cabo ataques aéreos hasta que Hamas entregó los nombres.
Los israelíes y palestinos enfrentan un largo período de angustia mientras los rehenes, potencialmente enfermos, heridos o traumatizados, son liberados en pequeños lotes semanales—algunos regresarán en bolsas para cadáveres—y miles de familias desplazadas en Gaza regresan a los escombros de lo que alguna vez fueron sus hogares. Las autoridades de salud dirigidas por Hamas afirman que casi 47.000 personas han muerto en la guerra, pero muchos más cuerpos podrían estar bajo los escombros.
