La capital de Finlandia, Helsinki, se destaca por su innovadora red de túneles subterráneos, diseñada para facilitar la movilidad peatonal durante los rigurosos inviernos del norte europeo. Esta infraestructura, conocida como «Yläkaupungin maanalainen» (Ciudad Alta Subterránea), se extiende por más de 400 metros bajo el centro de la ciudad y conecta estaciones de metro, tiendas, restaurantes y edificios clave.
En una ciudad donde las temperaturas pueden descender hasta los -20°C y las calles se cubren de nieve y hielo, esta solución no solo protege a los peatones de las condiciones climáticas extremas, sino que también garantiza movilidad segura y accesible durante todo el año.
Además de su función climática, la red cumple un rol estratégico en la descongestión del tráfico urbano. Al ofrecer rutas alternativas bajo tierra, se reduce la circulación peatonal en superficie, aliviando las calles principales y mejorando la fluidez general de la ciudad.
Complementada con una amplia red de ciclovías y calles peatonales, Helsinki se posiciona como una de las ciudades europeas más avanzadas en infraestructura urbana sostenible e inclusiva, adaptada a las necesidades de sus ciudadanos.
